ayuno intermitente

Riesgo de muerte por ayuno intermitente

Alimentación

El ayuno intermitente puede aumentar el riesgo de muerte. Este aviso surge de un estudio comunicado en las Sesiones de Epidemiología y Prevención de la American Heart Association en marzo de 2024.

El ayuno intermitente se basa en pasar una serie de horas sin comer a lo largo del día. El tiempo de ayuno varía de unas recomendaciones a otras. Uno de los regímenes más populares es el denominado 16:8. En este caso, se recomienda ingerir toda la comida del día en 8 horas. Durante las 16 horas restantes se debe mantener el ayuno. Existen otros esquemas que han sido igualmente efectivos, como el régimen 5:2 o el ayuno a días alternos.

Estos esquemas de alimentación se han sugerido para asimilarla a la que tenían los hombres prehistóricos. La alimentación actual no suele dejar mucho tiempo con hambre. La mayoría de las personas comen algo en cuanto sienten hambre. Sin embargo, en la evolución, el hombre prehistórico pasaba muchas horas de ayuno.

 

Beneficios del ayuno intermitente

Algunos estudios sugieren que el ayuno intermitente es beneficioso para la salud. Uno de los beneficios más destacado es la reducción del sobrepeso y la obesidad. Esto permite mejorar enfermedades tales como la diabetes y la apnea del sueño.

Asimismo, el ayuno intermitente ha mostrado que puede reducir la inflamación. Por ello, mejora enfermedades como la artritis y el asma. También se han comunicado beneficios sobre la enfermedad del Altzheimer y la esclerosis múltiple.

Por otro lado, el ayuno intermitente se ha asociado a una disminución del riesgo cardiovascular. Esto parece ser secundario a la reducción del peso corporal, la presión arterial, así como del azúcar (glucosa) y el colesterol de la sangre.

Por último, se ha observado que el ayuno intermitente puede prologar el tiempo de vida. Está demostrado que las células se liberan de las sustancias dañinas cuando no tienen alimento. De esta forma, el ayuno prolongado permite que las células se limpien y, con ello, puedan sobrevivir más tiempo.

Riesgos de ayuno intermitente

En primer lugar, hay que destacar que el ayuno prolongado puede conllevar la aparición de efectos secundarios. Las personas que siguen pautas de ayuno intermitente refieren, con frecuencia, sensación de decaimiento y dolor de cabeza. En algunos casos se producen náuseas, diarrea, ansiedad, nerviosismo, irritabilidad e insomnio.

Por otro lado, el ayuno intermitente puede dar lugar a pérdida de la masa muscular, disminución de la capacidad física y trastornos de la conducta alimentaria. Asimismo, puede producir alteraciones importantes en personas con determinadas enfermedades.

En concreto, el ayuno intermitente es peligroso en los diabéticos, ya que conduce a cambios bruscos en los niveles de glucosa en sangre. Esto puede dar lugar a situaciones serias, sobre todo por hipoglucemia. En estos casos, el paciente puede llegar a perder la consciencia y requerir tratamiento urgente. Por otro lado, el ayuno intermitente dificulta el correcto tratamiento y control de la glucosa en sangre.

El ayuno intermitente puede tener también consecuencias importantes en personas hipertensas. La falta de alimento durante muchas horas puede dar lugar a hipotensión. Esto ocurre, sobre todo, en personas que toman medicación para la hipertensión arterial. Igualmente, si no se ingieren líquidos durante el ayuno, puede producirse deshidratación. Esto es especialmente importante en personas mayores. También en las que tomas ciertos medicamentos, sobre todo diuréticos.

 

¿El ayuno intermitente, es beneficioso o perjudicial?

Uno de los resultados más destacable se encontró en una revisión científica exhaustiva publicada en enero de 2021 en Cochrane. En ella no se encontró evidencia suficiente para saber si el ayuno intermitente podría prevenir la enfermedad cardiovascular.

Para dicha revisión se encontraron 26 estudios relevantes, de los que se incluyeron 18 estudios. En ellos se comparaba el ayuno intermitente con la alimentación habitual y/o con dietas para adelgazar. La duración de los estudios fue de 4 semanas a 6 meses.

En dichos estudios no se encontraron datos sobre la mortalidad global, mortalidad cardiovascular, riesgo de infarto de miocardio, insuficiencia cardiaca e ictus. Se observó que el ayuno intermitente permite reducir significativamente el peso corporal, pero igual que las dietas para adelgazar. La conclusión de la revisión de Cochrane es que no hay evidencia del beneficio del ayuno intermitente sobre el riesgo cardiovascular.

El ayuno intermitente parece tener efectos beneficiosos a corto plazo, sobre todo para adelgazar. Pero hasta 2024 no existían estudios a largo plazo. Por lo tanto, todos los beneficios sobre la salud que se le achacan son suposiciones.

En el estudio citado en el primer párrafo del presente artículo, se encontró que las personas que seguían un ayuno intermitente 16/8 tenían un 91% más de riesgo de muerte cardiovascular. Hay que destacar que el estudio se realizó mediante encuestas de salud a 20.000 personas entre 2003 y 2018.

Este estudio ha lanzado la alarma sobre los riesgos del ayuno intermitente en el riesgo cardiovascular. Sin embargo, sus conclusiones no son definitivas, dadas sus limitaciones, y deben tomarse con cautela.

En conclusión, lo recomendable es evitar el ayuno intermitente en personas con enfermedades previas, como diabetes, hipertensión y patologías cardiovasculares. Para seguir un ayuno intermitente seguro, lo ideal es estar libre de enfermedades importantes. Por ahora, solo debería recomendarse para disminuir el sobrepeso y la obesidad. Seguir una pauta de ayuno intermitente sin este objetivo, no está demostrado que sea útil para la salud. Habrá que esperar a la publicación de nuevos estudios para poder indicarlo con más conocimiento.