Riesgos del cigarrillo electrónico

Riesgos del cigarrillo electrónico

Tabaco

Los cigarrillos electrónicos son dispositivos con un sistema que calienta un líquido para producir vapor para inhalación. Fueron diseñados con la intención de favorecer el abandono del tabaco. Sin embargo, es importante conocer los riesgos del cigarrillo electrónico. El vapor que producen puede contener nicotina o no. La idea es que el fumador cambie el tabaco por el cigarrillo electrónico durante un tiempo, generalmente entre uno y dos meses, y deje de fumar definitivamente.

Sin embargo, esto no se consigue siempre, además de que el uso del cigarrillo electrónico se ha extendido para uso diferente. Algunas personas siguen con él indefinidamente, a veces alternándolo con el tabaco. Incluso, se dan casos de personas, sobre todo jóvenes, que usan el cigarrillo electrónico sin haber fumado nunca antes.

 

Abandono del tabaco

El cigarrillo electrónico se ha recomendado como una alternativa saludable para el abandono del consumo de tabaco. Su uso durante un tiempo corto permite dejar de fumar, lo que supone un gran beneficio para la salud. Sin embargo, se desconocen las consecuencias de su uso prolongado. Además de la nicotina, el vapor del cigarrillo electrónico contiene otros productos químicos que pueden ser tóxicos. Ya se han descrito algunos riesgos del cigarrillo electrónico y se hace necesario vigilar sus efectos adversos sobre la salud a largo plazo.

En ciertos estudios se ha observado que la incidencia del cese de fumar es modesta con el uso del cigarrillo electrónico. Por el contrario, un número significativo de los participantes en estos estudios continúan usando el cigarrillo electrónico. En los análisis del vapor de los mismos se han encontrado hasta 22 sustancias tóxicas aparte de la nicotina. Incluso, en algunos casos, el contenido de nicotina del vapor es superior al del humo del tabaco. Existe una amplia variación en el contenido de los cartuchos de los diferentes tipos y marcas de cigarrillos electrónicos. Sin embargo, las ultimas generaciones tienen un contenido y distribución de la nicotina similares a las de los cigarrillos convencionales.

En algunos estudios, el uso del cigarrillo electrónico por fumadores durante 4 – 6 semanas permitió la deshabituación tabáquica en un número significativo de participantes, y el efecto se mantuvo en el tiempo. Esto permite que los que dejan de fumar estén libres de la acción tóxica de los productos del tabaco. De esta forma tendrán menos riesgo de cáncer y de enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, esto solo será así si abandonan también el cigarrillo electrónico, el cual puede tener efectos tóxicos similares al tabaco.

 

El cigarrillo electrónico

Los cigarrillos electrónicos pueden contener nicotina y, además, una disolución líquida con glicerol o propilenglicol y otros productos químicos que pueden ser tan nocivos como los que se encuentran en el humo del tabaco. La exposición prolongada a algunos componentes de los aerosoles podría dar lugar a complicaciones respiratorias, tales como asma, enfermedad pulmonar obstructiva crónica e inflamación pulmonar.

La inhalación de los productos tóxicos del vapor del cigarrillo electrónico puede provocar una reacción inflamatoria en el pulmón similar a la de una neumonía típica o atípica. Además, la llegada de estos productos tóxicos a la sangre puede dar lugar a un estado de inflamación generalizada, con aumento de los factores inflamatorios circulantes, lo cual podría inducir daño en diferentes órganos, como el corazón, el riñón o el hígado.

Se ha sugerido que el uso prolongado del cigarrillo electrónico puede causar ateromatosis y diferentes tipos de cáncer. Además, la ingestión del contenido líquido del cigarrillo podría causar parada cardiorrespiratoria, lo que ha sido utilizado como método de suicidio en algunos casos. A pesar de todos los riesgos comentados, el uso del cigarrillo electrónico por un corto periodo de tiempo es útil para favorecer el abandono del tabaco, sin riesgos significativos. Sin embargo, es importante vigilar sus efectos tóxicos a largo plazo y establecer una regulación sobre el cigarrillo electrónico.